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jueves, 30 de agosto de 2012

L.

No sé por qué extraña situación cada vez que llueve me sale tu cara entre la lluvia... Hoy creo que ha sido la primera vez en todo el verano que ha llovido, hoy te he recordado sin llorar. Parece imposible ¿verdad?. Hacía mucho que no lo conseguía.
Me he acostumbrado al hecho de no tenerte, de recordarte, de darle al play a nuestros recuerdos. Sigue siendo difícil, no voy a negártelo nunca, pero parece que una asume situaciones.
Recuerdo que cuando te fuiste hubo mucha lluvia, muchos "días tristes" como los llaman. Ana y yo nos hicimos a la idea de que la lluvia eran tus lágrimas, que cada vez que llovía era el cielo que lloraba, tú que estabas triste. Qué cosa tan absurda viéndolo 5 años después, pero algo tan absurdo que sigo pensando... Tonterías que tiene una.
A pesar de eso, me gusta la lluvia, su olor, su tranquilidad, la humedad del ambiente, el sonido de las gotas en los charcos y mirar el reflejo de las gotas caer en una farola.
Ahora estoy relajada, tal vez por eso escribo, tal vez por eso no me cuesta expresarme, todo va rodado, los dedos van solos. La música suena de fondo, hoy Zahara y con las ganas amenizan mi minuto de gloria. Y fíjate, ahora me gustaría abrazarlo a él, que aunque parezca que no, también lo recuerdo, sólo que está muy muy mal visto que lo haga, como si yo no sintiera su marcha, como si hubiera dejado de quererlo, así que, hazlo tú por mí, tú que puedes...

Os recuerdo a los dos, a todos, porque cada vez sois más ahí arriba, o serán imaginaciones mías pero parece que cada vez estoy más sola aquí abajo. Sea como sea, mañana tendré que levantarme y pasado y vivir, hacerlo lo mejor posible, aunque mira que me lo ponéis difícil cabrones o, como dice mi madre, es lo mejor para mí. Será que no debía volver a jugar, o no allí y que cuando una puerta se cierra se abre una ventana y si esta ventana está en Aspe, o en otro año, será que no iba a estar bien aquí... Eso sí, deja de cerrarme puertas, que me estoy cansando de abrir para nada eh!

Por cierto, gracias por hacer que llegara bien, ahora te la dejo a tí. Cuídala como yo lo haría...

Os quiero.

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