Páginas

viernes, 2 de noviembre de 2012

.

Cuando alguien no te merece tienes algo con lo que excusarte, algo a lo que aferrarte, pero ¿y cuándo eres tú quien no merece a la otra persona? ¿Cuándo la otra persona roza la perfección y tú no tienes ni la mitad que ofrecerle? ¿Entonces, a qué te aferras? ¿Con qué te excusas?

No hay comentarios:

Publicar un comentario