Páginas

lunes, 11 de marzo de 2013

Adicta a esos rizos negros.

Siempre he pensado ser fuerte, que sabía serlo, que conseguía serlo.
Me equivocaba.

Soy quizás más débil de lo que nadie cree. Que hasta mi madre hoy se ha asombrado cuando me ha visto llorando como una niña al enterarme que quedan dos meses (aún dos meses después de llevar casi tres) para que Cristina vuelva.
No miento cuando digo que me cuesta de verdad escribir esto, que está siendo una eternidad, y que nunca pensé que fuera tan difícil tenerte tan lejos durante tanto tiempo.
Sabía que te echaría de menos, incluso las primeras semanas parecía que no ibas a tardar en volver.

Admito que ahora me cuesta, que esto pasa el límite de la frase "echar de menos".
Admito que ahora sí me siento cuesta arriba, con sol, cansancio y sin poder descansar.
Es como cuando te propones una meta, y cuanto antes la empieces, antes la acabas, y lo mejor, cuanto antes la acabas antes obtienes la recompensa.
Esto es lo mismo, creo que cuanto menos piense que te echo de menos, las cosas que haría si estuvieras aquí, antes llegarás. Antes volveré a abrazarte en el aeropuerto.

Sólo pienso que este año nos está dando diferentes formas de ver la vida, a ti desde otro país, otra cultura, sin tu madre, sin tu sister, tu familia, Max, sin nosotras... A mí desde la soledad, desde el pensar en mí antes que en los demás. Y eso me lo has enseñado tú a más de 1000km de distancia. Con tus cartas y postales sorpresas y tus te quiero al final de cada conversación ansiada.
Por que te echo mucho de menos pero sé que estás bien allí y que si no lo estás yo cojo un avión y me planto a romperle la cara a quien se atreva a hacerte daño.

"Mataría monstruos por ti". Por ti sí. Por ti VALDRÍA LA PENA.
Te quiero cuchifritina :)
Con mis 22 te tengo aquí, eres mi mejor regalo...

No hay comentarios:

Publicar un comentario