Páginas

jueves, 25 de noviembre de 2010

Sonrio por pensar que fui ÚNICA para ti.





Me obligan a escribir algo positivo...
La verdad que no sé qué escribir. He estado hablando de ti, así que, de tí voy a sacar lo positivo.
Me he acostumbrado a echarte de menos, me he acostumbrado por el simple hecho de que me obligaste a hacerlo. Te fuiste sin que pudiera despedirme de ti, y no me dejaron hacerlo de otra forma que de pensamiento. Era pequeña, supongo que habría sido peor el remedio que la enfermedad, pero eras mi abuelo, ERES mi abuelo, y como tal, te quiero.
Ahora recuerdo la manera que tenías de fumar, cogiendo los cigarrillos como si se trataran de otra cosa. En esa época ni yo sabía lo que era, pero ahora me recuerda a ti. ¿Sabes? Cuando quiero recordar tu voz pongo aquel video de Navidad. Yo tenía unos 6 o 7 añitos y tú y la abuela os veníais con nosotros a casa de la abuela Magdalena a cenar en nochebuena. Esperábamos juntos a que papa noel nos llenara la escalera con grandes paquetes que me ayudabas a destapar. Quien pudiera volver a vivir de nuevo en esos recuerdos.
Recuerdo los días de caza y la de mañanas de domingo que intentasteis meterme en la piscina grande! Recuerdo los domingos de paella y las siestas a tu lado.
Tu olor lo olvidé, sí, aunque me cueste asumirlo, lo hice. Llegó un momento que tu casa dejó de oler a ti, y aunque me sigue dando miedo entrar a tu habitación, se que tu olor se perdió hace ya muchos años hasta incluso de la cama donde te despediste de la vida.
Me satisface saber que fui tu preferida, que siempre lo fui y lo seré, que era tu niña, tu única nieta, y que eso nadie me lo podrá quitar nunca. Me llena de orgullo pensar que fui la preferida de alguien, tú, que fuiste mi ahijado, tú, mi abuelito Paco.
El día que nos volvamos a encontrar te daré el abrazo más grande del mundo, por todos los abrazos pequeñitos que nos quedaron por darnos en vida.
Sacar algo positivo de tu muerte es tarea difícil, pero no imposible. Y por lo tanto, lo positivo que yo saco de ello es lo unida que ahora me has dejado a la abuela. Es como si un trocito de ti se hubiera escondido por un bolsillo de alguno de los batines de la abuela, de ese batin rosa que tantas veces se pone y que tanto le digo yo que se quite :) o de las risas sonoras que tiene o de la mirada acompañada de una sonrisa que se le pone cuando vamos a la huerta y le dice a mi padre mientras le acaricia "ai mi miguelico".
No creas que no te echamos de menos, claro que lo hacemos, y ella es tal vez quien más note tu ausencia, pero hemos aprendido a recordarte y que no duela, a recordarte y pensar en los buenos momentos que hemos vivido contigo.
Porque fuiste el mejor abuelo, padre, marido y persona que se pudo encontrar jamás.

Por eso te digo que te quiero, por lo orgullosa que me sigo sintiendo de ti, aunque no estés aquí bajo con nosotras.

2 comentarios:

  1. Sabes sacar hasta de algo triste un tema positivo...
    Enserio, yo quiero escribir como tú, enseñame(L)

    ResponderEliminar
  2. Como ha dicho Marta.9 hasta cuando se trata de algo triste sabes encontrarle algo bueno. Ahora me toca el turno de hablar a mí. Miriam como te he dicho en tu entrada anterior, nada es eterno. Pero esas personas puede permanecer en nuestros recuerdos y, sé que esto es lo que siempre se dice cuando pasan estas cosas, pero por desgracia, es lo único que se puede decir, y sí guardas los recuerdos, siempre que halla alguien que los tenga en su mente, no se habrán ido del todo. Recuerda los recuerdos Mir. Sigue este consejo. Besos guapísima.

    ResponderEliminar