Dieciseis de febrero.

Nuestras huellas dactilares no se borran de las vidas que tocamos.
Y tampoco se borran las huellas dactilares de las personas que han tocado mi vida.
Cada una de ellas tiene su lugar especial en cada rinconcito de mi cuerpo. Algunas estan en el cuello, otras en la sonrisa, en la mirada, en un recobijo detras de la oreja, o escondidas tras un lunar de la espalda. Algunas yacen en mi ombligo y tambien hay de las que se despiertan en la corva.
Otras, y solo algunas privilegiadas, laten al mismo tiempo que mi corazon, sumandole fuerza, restandole dolor.

Hay dias especiales en los que las restas no funcionan y las sumas terminan por dividir. Hoy, dieciseis de febrero, es uno de esos dias en los que, a ratitos el corazon se para a pensar en todo lo que un dia vivio sin esas huellas dactilares con el. Los ojos veian realidad, las manos tocaban de verdad y los oidos escuchaban vida. Ahora ni los ojos ven, ni las manos notan ni los oidos oyen. Ahora el unico que siente es el corazon, y la memoria, donde estan almacenados los recuerdos. Los recuerdos que un dia cree contigo, los que creamos juntas, los que creaste con nosotros, en la realidad, aqui, en vida.
Hoy sigue siendo tu dia especial, a pesar de que no hayan velas que soplar, a pesar de que no tengamos tarta que comer, ni regalos que entregar... A pesar de todo ello, el tiempo no se detiene.
Hoy hace 20 años que asomaste la cabecita a este mundo con la tarea de alegrar a tantisima gente como hiciste.
Hoy, hoy es tu 20 cumpleaños, y por ello, a pesar de que no estes aqui, tienes tu regalo que te espera, tu tarta en la nevera y las velas encima de la mesa esperando que vengas, las enciendas y las soples entre sonrisa y foto...

Llegara el dia en el que eso se cumpla y volvamos a celebrar los cumpleaños, y no solo eso. Llegara el dia en el que todo sera como deberia haber sido, y el "echar de menos" no seria algo tan diario en nuestras vidas...